ALBERTO MAGNO GASTALDI DE LA PELOTA AL PINCEL “La pintura es un poema sin palabras”. (Horacio, poeta latino) “¡Qué va a ser famoso ese tipo, si vive a la vuelta de mi casa!”, reza un remanido latiguillo, mezcla de incredulidad e ignorancia, con que el vulgo relativiza el talento de alguien cercano o más o menos conocido. Parafraseando esa expresión, aunque con algunos cambios para adecuarla al caso que nos atañe, podría decirse “¡Qué va a ser artista ése, si reparte cartas en bicicleta!”. Nada hacía presagiar que Alberto Magno Gastaldi, hijo de Antonio Gastaldi (conductor de carroza fúnebre, cuando eran tiradas a caballo) y Josefa Appendino (ama de casa y lavandera del dispensario local), llegaría a se